Primavera

Esta mañana he ido a sacar al Tom y hacía un día de verano. Llevo días fijándome en los dientes de león que hay en las zonas de césped de debajo de mi casa. Hay un montón. A principios de la primavera me gustaba la combinación de verde y amarillo que hacían con la hierba. Durante las últimas semanas han dado fruto, apareciendo esas típicas bolitas como de algodón. Me gusta mirar cómo se mueven levemente con la brisa, tienen un aspecto tan suave y esponjoso... Me dan ganas de agacharme y soplar, como hacía siempre de pequeña, pero no lo hago, supongo que por vergüenza a las vecinas que salen a hacer la compra a esas horas. Me gusta esta clase de días soleados, en que empieza a hacer calorcito sin llegar a achicharrar, me alegran los pequeños paseos diarios con el Tom. Parecerá una chorrada, pero a veces incluso me hacen ver la vida de otra forma.